Esta operación se utiliza a menudo cuando la llave original se pierde o se daña, cuando el inmovilizador está defectuoso, o cuando se instala una ECU usada o reparada que no está sincronizada con el vehículo.
El inmovilizador se desactiva en la ECU, lo que permite que el vehículo arranque sin verificar la llave.
Permite evitar problemas relacionados con el inmovilizador sin necesidad de programar una nueva llave o reemplazar la ECU.
La desactivación del inmovilizador reduce la seguridad del vehículo, haciéndolo más vulnerable al robo.
Esta intervención requiere conocimientos especializados en electrónica automotriz y debe ser realizada por profesionales.
Principalmente cuando se pierde una llave, el inmovilizador está defectuoso o se utiliza una ECU de segunda mano no sincronizada con el vehículo.
Permite arrancar el vehículo sin el inmovilizador, evitando costosos reemplazos de la ECU o reprogramaciones de llaves.
La seguridad del vehículo se reduce ya que el sistema antirrobo está desactivado, lo que aumenta el riesgo de robo.
El IMMO OFF se utiliza a menudo en talleres de electrónica automotriz para evitar fallos en la ECU o en el inmovilizador. Es una alternativa rápida y económica en algunos casos, pero reduce la seguridad del vehículo y debe aplicarse con precaución.
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